Entrenar en casa es la mejor solución para mantener un estado de forma mínimo que te permita aprovechar al máximo tu capacidad física. Además, se trata de un complemento ideal para esos días en los que estarás más tiempo dentro.
No se trata de un método que sustituya al pedaleo sobre tu ruta favorita, pero sí es un complemento ideal. Incluso permite rutinas específicas para trabajar en series de sprint, pedaleo de alta cadencia o cargas con muchos vatios.
¿CÓMO Y CUÁNDO UTILIZARLO?
Si eres de esas personas a las que le gusta levantarse temprano y con mucha energía, puedes utilizarlo antes de desayunar, así desayunaras con más ganas si eres de los que no suelen tener apetito a primera hora del día, y te encontrarás más activo a lo largo de la mañana.
Puedes hacer una sesión por la mañana y otra por la tarde. De esta forma, puedes añadir más tiempo a tus sesiones de entrenamiento, incrementas el metabolismo basal y no se hace tan pesado como una sesión única de rodillo.
Debemos tener en cuenta también el tiempo de entrenamiento a realizar. Por supuesto que no vamos a igualar el tiempo de una sesión prolongada en carretera, pero si tienes motivación, ganas y te hidratas bien, puedes hacer bastante tiempo.
¿CUÁNTO TIEMPO?
La verdad es que la duración es decisión de un@ mism@. Puedes utilizarlo durante intervalos de 25 minutos divididos en dos sesiones diarias. Se trata de una actividad que puedes realizar diariamente de forma muy cómoda.
Como recomendación, te recordamos la importancia de realizar un calentamiento previo y un estiramiento después de la actividad física.